Escoger un proyector antes que una televisión

Cuando se viven competiciones importantes de fútbol, los grandes aficionados hacen sus apuestas y quedan para verlo en grupo.
¿Quién no tiene un amigo que nos invita a ver todos los partidos importantes en su casa para presumir de su gran pantalla de televisión?, ¿Quién no disfruta de una buena serie en casa por la noche después de una larga jornada de trabajo?.

Son muchos momentos los que vivimos frente a una televisión y gracias a las nuevas plataformas; disfrutamos de mucho más contenido que antes.

Y es qué, ¿puede un proyector ser una alternativa real a la televisión? ¿Por qué escoger un proyector antes que una televisión?. Porque nuestra televisión ya nos ofrece darnos de forma inmediata acceso a contenido de diferentes formas, por plataformas streaming, por conexiones para jugar a videojuegos y por reproductores externos; todo viéndolo en una pantalla.
Pues bien, los proyectores ofrecen todo esto y mucho más. Por ejemplo, ahora mismo vas a comprarte uno televisor y tienes que elegir las medidas de esa pantalla; la cual, según el tamaño que quieras, pagarás un precio u otro y normalmente esa inversión se amortigua mínimo en 4-5 años como mínimo sin dar problemas las actualizaciones de las plataformas.
Sin embargo, en un mismo proyector, la pantalla no está constreñida a un tamaño específico porque tú eliges el tamaño con el que ver cualquier contenido. ¿ Te apetece ver una película en 80 pulgadas o un partido en 120 ? lo puedes hacer.

Ya muchos futboleros han optado por ver sus partidos solo en proyectores, con 300”; según ellos, la forma ideal, porque ¿Qué televisor te permite ver cualquier cosa a 300 pulgadas?, ninguno porque no existen a día de hoy televisores comerciales tan grandes. Si lo hubiera el precio sería tan desorbitado que no todo el mundo podría permitírselo. Y es que este es otro de los detalles por lo que escoger un proyector antes que una televisión…el precio y el espacio.
No es lo mismo comprarse un televisor y tener que ajustarlo en la pared si es pequeño o además, tener que integrarlo en un lugar donde esté apoyado en algún tipo de mueble que hemos comprado específico como base. Además, la cantidad de cableado de supone instalar una televisión en conjunto con algún otro dispositivo; sin contar cargadores o lámparas…., supone un gran uso del espacio.

Cuando compremos un proyector debemos tener en cuenta una regla básica: a mayor distancia, más pulgadas de proyección pero a mayor distancia peor enfoque y definición de imagen. Por lo tanto debemos optar por un proyector de tiro ultra corto o ultra short throw ya que viene preparado para poder ponerlo perfectamente en tu salón, no son como los proyectores antiguos que tenías que tener un gran espacio para ponerlo.
Así pues, cuando hablamos de ultra corto hablamos de un ratio de 0,22 por ejemplo. Por ejemplo, los actuales proyectores son capaces de reproducir hasta 88 pulgadas en apenas 11,8 centímetros. Para tener una visión más exacta de las cosas y poder entender, para obtener 120 pulgadas, se necesita estar a 31,7 cm de la pared y te olvidas de configuraciones raras.

Otro de los aspectos por los cuales escoger un proyector antes que una televisión es su calidad de imagen. Cuando instalamos el proyector solo es enchufar pero debemos respetar las reglas de las películas tal y como se crearon y como fueron concebidas; es decir, que su color, contraste y las tecnologías asociadas se muestren con la máxima precisión, manteniendo su 4k y los tonos. Ese objetivo lo cumple el tiro de proyección que debe estar alineado con la superficie de proyección para evitar distorsiones visuales.
¿Y cómo lo hace? pues a través de una sistema llamado Point Warping que se encarga por sí misma de la alineación horizontal y vertical; interpretando la pantalla que se le muestra y mediante una matriz de 15 puntos, se asegura de que todo lo que veamos cumple con las proporciones correctas.

Pero realmente, ¿Cuánto suele costar un proyector? Porque claro, una gran potencia conlleva un gran gasto; dirían muchos. Pues bien, los proyectores recurren a una fuente láser con una altísima eficiencia. Sin embargo, dispone de 15 años de vida útil frente a los 4-5 útiles de los convencionales por lo cual, merece mucho la pena disponer de uno en casa.
¿Y tú? ¿Te pasas al proyector?

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